Suben a la luna como barriletes
Exploran el espacio entre sonrisas
Van cantando canciones por el aire
Dulces como pájaros de colores
¡Ah! los artistas...
bájenos un astro para todos...
Valientes, sentimentales
Llenos de gracia al andar y al hablar
Esconden entre los dedos un dios que se ríe
Y es su amigo aunque los haga sufrir
Enaltecen o desgarran la sensualidad,
Pero caen en la trampa adorándose...
Sin embargo son las víctimas más hermosas
Cuando se entregan a sus almas de palomas...
¡Ah! los artistas...
bájenos un astro para todos...
nada más que una premonición
los ata a cualquier decisión
nada más que su percepción los guía
porque entre tanta obscuridad
ellos son como antorchas,
como llamas que desafían,
que iluminan los confines más obscuros,
los momentos más terribles...
bájenos un astro para todos...
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